Preguntas sobre tratamiento

1. ¿ Qué hago si mi hijo respira por la boca? 

 

Lo más certero sería identificar si es temporal o permanente. Si es temporal, podría estar asociado a un cuadro de resfrío, lo que quiere decir que una vez que el niño se mejore va a desaparecer esta respiración por boca y retornará la respiración normal por nariz.

Si por el contrario, el niño respira por boca la mayor parte del tiempo, es de suma importancia consultar con un médico Otorrinolaringólogo, que evaluará y podría identificar la causa. A veces los niños poseen amígdalas o adenoides de mayor tamaño que impiden el ingreso suficiente de aire, por lo que el niño tenderá a abrir la boca para respirar. Esta situación se acompaña generalmente de ronquidos nocturnos.

En el caso de los niños con problemas de lenguaje esta situación es aún más perjudicial, ya que el oído medio no se ventila adecuadamente, lo que produciría un descenso en la audición de hasta 40 db. Esta disminución de la audición interferirá en el tratamiento y superación de sus problemas lingüísticos.

La respiración bucal es un cuadro que trae importantes secuelas a nivel orgánico (paladar, columna, dientes), por lo resulta urgente consultar al médico especialista indicado.

2. Cómo son las conductas auditivas de los niños menores de 1 año?

 

En primer lugar es importante señalar que los niños sin antecedentes de riesgo durante el embarazo, sin dificultades en el parto y que no han sufrido enfermedades que podrían afectar la audición (como meningitis bacteriana, TEC, etc.) probablemente muestren un desarrollo normal.

De todas maneras, los padres pueden observar conductas que muestran este adecuado desarrollo:

- durante el 1er mes de vida, el bebé tiene predilección por la voz de su madre, la que tiene una función reguladora sobre su conducta (puede calmarlo, por ejemplo). También responden por medio de conductas reflejas frente a ruidos fuertes (se sobresaltan y luego lloran, cierran bruscamente los ojos). Estos reflejos son evaluados por los pediatras en los controles.

- al 3er mes se pueden observar otras conductas reflejas frente a ruidos fuertes. Por ejemplo, mueve los ojos y comienza a mover la cabeza buscando la fuente sonora.

- desde el 4to mes escucha ruidos de 60 decibeles y la función auditiva está en pleno desarrollo.

- entre el 5to y 8vo mes ya logran buscar lateralmente la fuente de ruido de menor intensidad (50 decibeles). También reacciona frente a su nombre.

- entre los 9 y 12 meses reconoce melodías, sonidos familiares y busca el estímulo sonoro hacia abajo de 30 decibeles.

3. Cómo puedo estimular el lenguaje de mi hijo?.

 

Utilizando  constantemente un lenguaje claro y adulto, evitando los diminutivos y el lenguaje infantilizado.

Respetando el ritmo personal del niño cuando se expresa. No interrumpirle cuando cuenta algo. No anticipar su respuesta aunque tarde en darla.

Si el niño comete errores en su lenguaje, no reírse de estas incorrecciones, repetir constantemente la expresión. Se puede utilizar el método de corrección indirecta de las palabras del niño, respondiéndole frecuentemente, repitiendo sus frases, corrigiendo las palabras mal dichas y añadiendo las que no dice, pero siempre después de que él haya acabado de hablar.

Habituando al niño a que sepa escuchar y que él también sea escuchado.

Acostumbrando al niño a que mire a los ojos a la persona que habla, acudir cuando se le llama, dejar lo que esta haciendo y atender a lo que se le dice, no interrumpir a los demás hasta que no hayan acabado su mensaje.

4.  Cuando acudir al Fonoaudiólogo? 

 

El Fonoaudiólogo es el profesional de la salud que se ocupa de la prevención, evaluación, diagnóstico y tratamiento de los problemas de la comunicación, siendo el principal objetivo de su intervención potenciar la calidad de vida de las personas que por diversos motivos presenten alteración en este tan importante proceso, además el fonoaudiólogo está capacitado para realizar la intervención clínica necesaria a fin de promover o restablecer la alimentación por vía oral de los pacientes que lo requieran . Para que la comunicación se realice de manera óptima se requiere de un serie de factores tales como habilidades perceptivas relacionadas con la audición, habilidades cognitivas que hacen posible el pensamiento y el lenguaje, finos procesos motores responsable de la producción de la voz o la pronunciación de los sonidos del habla y por supuesto la intención de comunicarse. Cualquier alteración que afecte alguno de estos factores va a generar un trastorno de la comunicación. Ante cualquier sospecha de alteración se debe acudir al Fonoaudiólogo ya sea mediante la derivación de otro profesional (médico, psicólogo, profesor), etc. o directamente

 

5. Cómo prevenir los trastornos de la comunicación?

 

Es importante destacar que los trastornos de la comunicación se pueden manifestar tanto a edades tempranas como tardías y de acuerdo a la etapa existirán distintas estrategias adecuadas para abordar  y prevenir los diversos trastornos de la comunicación.

A nivel infantil básicamente la prevención se realiza a nivel preescolar favoreciendo y otorgando un adecuado desarrollo y estimulación del lenguaje, además de actuar evitando  y eliminando malos hábitos y conductas orales que puedan ir en desmedro de un adecuado desarrollo lingüístico y/o articulatorio.

En etapas tardías la prevención se realiza de diversas formas según la patología. Las patologías de voz generalmente se abordan con programas de higiene vocal, mientras que las patologías neurológicas generalmente se previenen evitando las causas más comunes de trastornos severos de la comunicación: Accidentes Cerebro Vasculares  (ACV) y Traumatismos Encéfalo Craneanos (TEC).